Centro Independiente de Informacion Nacional

sábado, 30 de abril de 2011

1° DE MAYO. MANIFIESTO INTERNACIONAL. Socialismo Revolucionario México (SRM)

sábado 30 de abril de 2011

1° DE MAYO. MANIFIESTO INTERNACIONAL





















¡VIVA EL PRIMERO DE MAYO!

¡VIVA LA REVOLUCIÓN EN EL MUNDO!

Declaración de la Liga de la Quinta Internacional

Desde su adopción como jornada unitaria de lucha mundial por la Segunda Internacional en 1889, el 1° de mayo ha estado siempre ligado a las luchas obreras por la democracia y contra las dictaduras, la explotación y la guerra. Desde ese momento se planteó la consigna de la jornada de 8 horas, sin embargo, la lucha contra las largas jornadas y condiciones de explotación, contra el trabajo infantil e incluso el trabajo esclavo serán una constante mientras exista el capitalismo.

Por encima de todo, el 1° de Mayo es una celebración del internacionalismo que une a los trabajadores de todo el mundo y es contrario a todo intento de dividir a la clase trabajadora por nacionalidad, sexo, idioma, raza, ideología o religión.

Este 1° de Mayo dirigimos nuestros ojos especialmente a los países árabes en medio de un levantamiento revolucionario histórico, a Egipto y Túnez, donde los jóvenes y los trabajadores jugaron un papel vital en la reducción de las dictaduras que los habían oprimido desde hace décadas. El papel de las mujeres en estas revoluciones demuestra el potencial para un mayor avance de sus derechos como genero. La lucha contra la crisis económica y los plenos derechos políticos democráticos está lejos de completarse por los nuevos regímenes que tratan de prohibir las huelgas y los gobiernos militares que siguen en el poder.

En especial, expresamos nuestra solidaridad con los trabajadores de los países árabes que luchan por derribar los regímenes represivos de Libia, Siria, Yemen, Bahrein y también en Irán. Condenamos totalmente la intervención militar de las potencias imperialistas europeas y norteamericanas en Libia en nombre del "humanitarismo", ya que sus motivos reales son continuar el saqueo de las riquezas petroleras de la región y para detener el avance de la revolución que pretende lograr conquistar objetivos antiimperialistas y de justicia social.

El año pasado ha sido testigo de las marchas masivas y huelgas de protesta general en muchos países europeos sobre todo en Grecia, Portugal, Irlanda y Gran Bretaña, donde los gobiernos están tratando de descargar el costo de la gran crisis que comenzó en 2008 sobre las espaldas de la clase obrera, privatizar la educación, los servicios de salud al igual que todos los servicios públicos, y aniquilar el seguro de desempleo de los trabajadores.

Sin embargo, los líderes sindicales oficiales, la burocracia sindical y los partidos reformistas, con demasiada frecuencia desvían estas luchas contra la austeridad y su impacto decisivo, por ello debemos redoblar los esfuerzos para rebasarlos. Los militantes sindicales clasistas y el movimiento organizado de las bases deben centralizar la lucha e impulsar huelgas generales para derribar a estos gobiernos neoliberales que están tratando de destruir las conquistas sociales producto de la lucha de muchas generaciones de trabajadores.

En los Estados Unidos de Norteamérica, los sindicatos se han despertado de un largo sueño por los salvajes ataques a sus derechos de sindicalización y los recortes masivos lanzados por los gobernadores derechistas. La ocupación masiva de Madison, capital del estado de Wisconsin, y semanas de manifestaciones en Ohio, la huelga de solidaridad de los estibadores de la Costa Oeste, indican que los trabajadores norteamericanos, por fin están decidiendo que ya es suficiente. Para dar un gran paso hacia adelante los trabajadores de Estados Unidos tendrán que romper con los demócratas para unirse y formar un nuevo partido anticapitalista, dónde estén unidos sin importar origen los trabajadores blancos, negros, latinos y demás minorías.

El subyacente acicate para estas luchas en todo el mundo es la crisis histórica del sistema capitalista, con un desempleo de masas, que afecta especialmente a los jóvenes, aumentos de precios de los alimentos y el combustible, y los ataques contra las conquistas sociales y los derechos sindicales. Todo sin olvidar la creciente rivalidad entre las potencias imperialistas por los recursos naturales y la mano de obra explotable de nuestro planeta. Su rivalidad amenaza más allá de las invasiones y ocupaciones de Afganistán e Irak. Los años y décadas por delante no sólo verán guerras y revoluciones, sino también el aumento en número de los llamados desastres "naturales". Muchos de ellos son en realidad resultado de los efectos destructivos del capitalismo sobre el medio ambiente; e incluso aun cuando no sea el caso, como siempre, serán los pobres y oprimidos los que sufran más las consecuencias del cambio climático.

Las luchas de los trabajadores chinos y de asia, sumados al crecimiento de la resistencia en latinoamérica de los trabajadores, campesinos e indígenas, de los migrantes en todo el mundo y en especial en los Estados Unidos fortalecen la resistencia día a día y estamos seguros que presenciaremos como se transformarán de luchas de resistencia en luchas ofensivas que sumarán fuerzas a la revolución mundial.

El 1° de Mayo debemos recordar que la clase obrera debe unirse a sus aliados naturales, que son los pobres, oprimidos y minorías discriminadas. La unidad de trabajadores y los pueblos es la única fuerza que puede por medio de su resistencia, terminar con la crisis mundial, sólo las revoluciones pueden resolver definitivamente las crisis y los demás peligros que se cierne sobre la humanidad. Debemos recordar que las mujeres, la mitad de la humanidad son doblemente oprimidas, en el hogar y en el trabajo, por ello estarán seguramente en las primeras filas de estas revoluciones.

Pero, para lograr su liberación, el proletariado mundial necesita construir nuevos partidos revolucionarios. La Liga por la Quinta Internacional, y sus secciones en Asia, Europa y los Estados Unidos hacen un llamado a los que luchan en todo el mundo para unir todas nuestras luchas, a unirse a nosotros en la creación de la expresión organizada de la clase trabajadora mundial, a unirnos en una nueva Internacional. La Quinta Internacional, el partido mundial de la revolución socialista. Socialismo Revolucionario México (SRM) retoma este llamado y hace votos para lograr una coordinación entre todos los que luchamos por el socialismo.

Hagamos honor al internacionalismo proletario, y junto a millones de trabajadores de todos los países del mundo en lucha, este 1° de mayo, gritemos juntos, unidos en la decisión irrevocable de triunfar: ¡Proletarios de todos los países uníos!

¡VIVA LA CLASE TRABAJADORA MUNDIAL!

¡VIVA EL SOCIALISMO!

¡VIVA LA UNIDAD INTERNACIONAL DE LOS TRABAJADORES!

No hay comentarios.: